El Gourmet Urbano: 5 errores frecuentes que cometes al preparar tus comidas

miércoles, 10 de enero de 2018

5 errores frecuentes que cometes al preparar tus comidas

Supuestamente, preparamos nuestras comidas para poder alimentarnos de la forma más sana posible, pero es fácil caer en algunos errores sin darnos cuenta.

Se supone que la preparación de las comidas nos ayuda a comer de forma más saludable y a perder peso, ¿no? Bueno, esa es nuestra intención. Hace poco decíamos que seguir la dieta de tupper tiene muchas más ventajas que inconvenientes, ya que podemos ahorrar lo que nos gastaríamos en un restaurante, ganamos en salud, controlamos mejor los kilos, le damos un empujón a la imaginación…Sin embargo, aunque preparemos nuestras comidas, es fácil caer en algunos errores, por lo que te vamos a decir cuáles son para que les pongas remedio.

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No seguir la fórmula adecuada


Cada comida que preparas necesita tener carbohidratos, grasas y proteínas saludables. No puedes limitarte a comer solo hidratos o proteínas en una sola comida, a no ser que estés en un régimen especial (tipo dieta keto). Las comidas bien balanceadas son la clave para perder peso. Un ejemplo: mientras que las verduras son bajas en calorías y altas en fibra, debes incluir grasas y proteínas saludables para que la ensalada se llene lo suficiente para que los antojos de la tarde no te lleven a la pastelería más cercana.

Usar tuppers demasiado grandes


Debes de ser muy cuidadoso con los recipientes que usas a la hora de preparar tus comidas, ya que si usas tuppers muy grandes, no tienes por qué llenarlos hasta arriba: con eso solo conseguirás no controlar bien las raciones, y en última instancia, engordar, que es lo último que deseas. Asegúrate de tener recipientes adecuados a cada comida del día, de distintos tamaños, ya que quizá en algún momento te apetezca algo de fruta y no es plan de mezclarlo con platos salados.

No dedicar el tiempo suficiente


La planificación de las comidas es una tarea ardua y complicada, así que lo mejor es que escojas un día de la semana para organizarte, apuntar todo lo que necesitas y hacer la compra. No es lo mismo hacer una comida fuera de casa que dos o tres, así que si eres de los que se lleva el tupper a todos lados, asegúrate de dedicar el suficiente tiempo para poder comer sano a donde quiera que vayas. Siempre, claro, dependiendo de tu objetivo.

Comer todos los días lo mismo


Antes hemos mencionado el tema de la imaginación: si no te sale, ¿por qué no pruebas a comprar algún libro de recetas sanas? Te aseguro que existen miles de platos saludables y miles de maneras de prepararlos, por lo que no puedes estar todos los días comiendo las mismas ensaladas, el arroz con el pollo…te acabarás hartando y dejando la alimentación a un lado. Tampoco decimos que sea necesario hacer cinco comidas completamente distintas, pero puedes variar las verduras, la manera de cocinarlas, alternar frutas, fuentes de proteína, etcétera.

Ser demasiado estricto o demasiado saludable


Preparar comidas y refrigerios que mantengan los macros y calorías bajo control toda la semana definitivamente te dará los resultados que buscas, pero si te sientes deprimido acerca de cuán estricta es tu dieta, podrías desanimarte y rendirte. Y tampoco es eso. Es muy importante darse algún capricho de vez en cuando, así que si has seguido tu alimentación de forma estricta durante unos cuántos días, es hora de permitirte algún antojo. No seas demasiado duro contigo mismo o acabarás harto.

JAVIER ROBLEDO VICO

Fuente: As.Com

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